El equilibrio entre dar y tomar es el tercer de los órdenes del amor
Regula la necesidad de todos los miembros de llegar a un equilibrio justo. Cuando alguien nos da algo, nos sentimos en deuda con él.
Habiendo recibido algo del otro, por muy bello que sea, perdemos algo de nuestra independencia, ya que sentimos la necesidad de devolvérselo.
Cuando compensamos el regalo; por ejemplo, pagando por ello el precio total, volvemos a sentirnos inocentes y libres frente a la otra persona.
Hay dos tipos de relaciones entre el dar y el tomar.
Ahora aquí, lo que estamos haciendo es la de entre iguales. Entre iguales, tiene que haber un equilibrio.
Cuándo damos y luego recibimos, y nosotros volvemos a dar y luego volvemos a recibir, el equilibrio se mantiene. Mientras hay un equilibrio, no hay problema.
El problema se produce cuando empezamos a dar, y seguimos dando, y volvemos a dar y continuamos dando, sin recibir nunca nada.
Carme Tuset
Licenciada en psicóloga, especializada en adopción y facilitadora de constelaciones